Nuevas relaciones entre países árabes y sudamericanos se establecieron en la III Cumbre ASPA (América del Sur y Países Árabes), que tuvo lugar en la ciudad de Lima.
El Perú, entre otros acuerdos con las economías más fuertes del mundo árabe, logró presentar una cartera de inversiones que bordean los US$ 20,000 Mlls., donde el 80% es para el rubro infraestructura,
De ahí, que el gobierno y el país deben hacer sus mejores esfuerzos para mostrar al mundo un entorno también amigable para el capital foráneo, traducido en estabilidad macroeconómica, con un cambio de moneda flexible según el mercado, con un plus muy importante para el inversionista extranjero, que es la confianza en la repatriación de las ganancias generadas.
Miguel Castilla, ministro de economía del Perú, se manifestó, que de cristalizarse dicho evento, ".../ el Perú se consolidará como el segundo mercado de Sudamérica en captar inversión foránea para convertirla en parte fundamental de su PBI, después de Chile". Y en verdad sería un salto cualitativo de nuestra economía, que iría directamente a elevar la calidad de vida de todos los peruanos.
Respecto a la posterior rueda de negocios donde se expusieron puntos de vista sobre el desarrollo de los sectores de agroindustria, energía y comercio entre los principales, Mehdi Al Amine, director del banco de inversiones de Novo, señaló que los árabes al respecto, tenían experiencia y medios para llevarlos adelante.
La relación entre los países asistentes a la III Cumbre ASPA, se ubicó más allá de cuestionamientos ideológicos, no sin antes dejar en claro, la tolerancia religiosa, así como, el rechazo a la violencia, al terrorismo y respeto irrestricto a los derechos humanos.
La nota discordante se le puede atribuir a Evo Morales, al demandar al presidente Chileno Sebastián Piñera, lo que él considera, su legítima salida al mar por parte de Bolivia y, además de sindicar a Chile como un peligro bélico para la región, a lo que el mandatario aludido señaló enfáticamente ".../debo defender la soberanía y el mar chilenos", todo ello enmarcado dentro de un respeto a los tratados internacionales concluyó.
La "primavera árabe", luego del derrocamiento de Ben Ali, Muamar Gadafi y Hosni Mubarak de Túnez, Libia y Egipto respectivamente, viabilizan los acuerdos contenidos en la Declaración de Lima firmados por los 33 países asistentes.
Al finalizar la cumbre Nabil El-Araby, Secretario General de la Liga de Estados Árabes agradeció la generosidad del Perú, así como la organización en la realización de la presente Cumbre, señalando que la próxima reunión tendrá lugar en arabia saudí.
En fin la liga árabe quedó positivamente sorprendida con todo lo que el país inca puede brindarle y como "cereza" del evento, en declaraciones del chef Gastón Acurio, degustaron gran variedad de la culinaria peruana incluso, pidieron para llevar en el avión.