Una Abnegada Maestra de la escuela primaria, nacida en los populares barrios de Uchupampa, a escasos minutos de la histórica Lunahuana, valiente pueblo, perteneciente a la provincia de Cañete, enclavada en maravilloso valle, cuyos guardianes lo constituyen pétreas y hermosas colinas, en cuyas partes bajas recorren el Señorial Rio Cañete, que desemboca en el Mar Pacífico. Ella fue la Profesora Maria Emilia Sánchez de Sánchez esposa del Profesor Manuel Inocente Sánchez Canchari muy cerca a este productivo valle, se encuentra la Ex-hacienda Hualcará donde se había abierto una escuelita fiscalizada que en parte era subvencionada por la administración de dicha hacienda.
LA ABUELITA EMILIA nos contó en una oportunidad, justamente en la hacienda Hualcará, donde enseñaba, tuvo entre sus alumnos a los Fernández- Meizan. Entre ellos estaba Teodoro (Lolo) que había nacido el 20 de mayo del 1913; seriecito, obediente, pero un tanto juguetón, era hijo del administrador de la hacienda Hualcará, Don Tomas Fernández esposo de Raymunda. Lo de Teodoro (Lolo) se debe a que el hermano de Raymunda se llamaba Teodoro y en recuerdo de ese familiar, lo bautizaron así.
Teodoro fue el sexto alumbramiento y cuando nació fue un robusto varoncito sin saber que era el ídolo de multitudes y que pasearía triunfalmente sus cualidades balonperisticas por Europa y muchos pases del mundo. Nunca dejo su Club Universitario de Deportes, pese a elevadas propuestas que le llegaron desde el exterior.
SU PROFESORA
Se llamó Maria Emilia Sánchez la que había comenzado su labor docente en 1906 y ganaba un sol diario es decir 30 soles al mes un pan costaba un centavo y un almuerzo costaba 0.30 centavos.
La Maestra Emilia dijo en vida "he trabajado en lugares alejados e inhóspitos de mi tierra, pero lo hice con cariño de docente y por la juventud de mi Patria, lo que constituye la más grande satisfacción de mi vida".
La Profesora Emilia Sánchez sirvió 50 años en el Magisterio Peruano, llegando a ser Directora en diferentes planteles estatales de sierra y costa.
Al jubilarse, por límite de edad, gruesos lagrimones corrieron por sus mejillas, ocultando los pliegues de sus maltratados y curtido cutis de una verdadera peruana al servicio de su pueblo.
Murió en una bella tarde de primavera en Lima el 10 de setiembre de 1983 cuando frisaba los 100 años y 8 meses. Sus restos reposan en el Cementerio "El Angel".
Había nacido un 6 de enero, precisamentecuando la comunidad Católica celebraba la Bajada de Reyes.