La OMS (Organización Mundial de la Salud) reveló, que actualmente mueren en el mundo siete millones de habitantes por año; lo que convierte a la población en el riesgo principal en cuanto a salud se refiere, por causa de la contaminación ambiental,.
Un despacho, desde Ginebra, la Organización Mundial de la Salud (OMS) sostiene que el 12% de la población mundial que reside en ciudades respira aire limpio y casi el 50% convive con una población 2.5 veces mayor que los niveles recomendados.
Son dos de las principales conclusiones de un informe presentado por la agencia sanitaria de las Naciones Unidas y que hace un análisis de la calidad del aire en 1,600 ciudades de 91 países en el mundo.
AMERICA LATINA
Con respecto a América Latina el estudio cuenta con datos de ciudades de Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, Costa Rica, Ecuador, Guatemala, Honduras, Mexico, Paraguay, Perú, Venezuela, Chile y Uruguay.
De este recuento se desprende que la ciudad con peores indicadores es Lima (Perú) y las que tienen un aire limpio, son San Salvador de Bahía en Brasil y Ambato, en Ibarra en el Ecuador.
Nuestra capital posee un índice general de 38 microgramos de PM 2,5 (partículas de hollín o metales pesados que son hasta 100 veces más pequeños que el grosor de un cabello) por metro cúbico. La OMS estima que lo ideal es mantener hasta 10 microgramos, al año.
Con respecto del informe de la OMS, la situación empeora en el cono norte de la capital (Ventanilla, Puente Piedra, San Martín de Porres) donde se llegó a registrar hasta 58 microgramos de PM2,5 por metro cúbico, cifra 6 veces más de lo que permite. La situación disminuye, pero aún sigue siendo alta, en Lima Sur (Chorrillos, Villa El Salvador) con 36 microgramos.
El Sr. Luis Tagle Pizarro, coordinador ejecutivo del Comité de Gestión de la Iniciativa de Aire Limpio para Lima y Callao explicó a la prensa que estas cifras se deben a que las partículas de PM2,5 producidas en el centro de la ciudad se desplazan por los vientos a estas zonas y quedan atrapadas por los cerros circundantes. "Ese material se queda allí... ¿y a quienes afecta? A la gente que se queda en esos distritos más horas al día: Las amas de casa, los ancianos y los bebes.
Las consecuencias de la exposición al PM2,5 es que al ser tan pequeñas penetran hasta a los alvéolos e incluso llegan a la sangre. Así se producen dolencias respiratorias y cardíacas.