Es la primera participación del Restaurante Mélisse en el Festival Montreal en Lumière y el chef Bertrand Giguère decidió realizar una actividad denominada "Terraza de Invierno". Adecuaron el gran espacio del exterior para montar la terraza y recibir al público y mantenerlos confortables al exterior, se dispusieron pequeños y decorativos calentadores, así como grandes calefacciones para terrazas a gas propano.
El chef Bertrand comentó que tuvo la idea de organizar esta actividad debido a que a él le gusta las actividades de invierno y ésta era una manera de incitar al público a salir de casa y venir a tomarse unos aperitivos y aprovechar nuestra terraza adecuada para disfrutar del exterior durante el invierno Montrealense.
Bertrand sirvió como tragos un coctel caliente "Holy smooky" confeccionado con tequila, té medio amargo y rayadura de naranja, además de vino blanco, rosado y tinto o también podía escoger un vino espumante.
Los aperitivos consistieron en:
Ostras provenientes de la Isla de Madeleine
Papada de cochinillo a la parrilla al carbón laqueada de jarabe de arce y salsa soya acompañado de un relish de menta
Pan al vapor con pierna de cochinillo desmenuzado y mayonesa picante, decorado con rabanitos, pepinillo y una salsita de culantro.
El coctel caliente vino a acompañar y calentarnos del frio. Cabe decir que el gusto del cochinillo cocinado a su punto fue muy sabroso y agradable al paladar. Bertrand supo combinar la salsa para resaltar el gusto del cochinillo. El pan a vapor con la pierna de cochinillo fue aderezado de mil maravillas.
El estar en la terraza, nos permitió conversar con el público, de manera convival, el frio formó parte de nosotros y disfrutamos de una magnifica velada al exterior.
"Escogí el cochinillo proveniente de chez Gaspor ya que es una pequeña granja familiar que existe desde hace 15 anos y que han logrado producir cochinillos de gran calidad, y decidí poner a disposición del público este producto en mi restaurante", nos explicó Bertrand.
Al entrar al restaurante Mélisse situado en la calle William del centro de la ciudad en un lugar moderno, descubrimos un oasis urbano, las decoraciones son vanguardistas, con magníficas plantas que caían de lo alto, así como en todo el restaurante, las mesas hechas de madera rústica de color blanco, el centro de mesa muy bien decorado con velitas que las iluminaban. Un grn contraste al descubrir tuberías visibles y hormigón. Bertrand comentó que la firma que se ocupó de las decoraciones del restaurante se llama Lovasi, y fueron Tania Perault de esta firma y Caroline Desgagné propietaria de Mélisse quienes trabajaron para crear este oasis de tranquilidad en medio del centro de la ciudad.
El Restaurante Mélisse ofrece productos de gran calidad, trabajados de manera simple con la preocupación de satisfacer a sus clientes. Se concentran más que todo en los ingredientes que sean sanos y frescos. Nada se prepara anticipadamente, los platos salen al momento. Los vinos son de importación privada y locales.
Para finalizar así respondió Bertrand a la pregunta sobre la profesión de chef, "Creo que en primer lugar uno debe tener una pasión por la carrera de chef, ya que es una profesión muy exigente y saber rodearse de las personas correctas porque hay mucho trabajo en equipo para obtener el éxito".
Invitó a la comunidad latino-quebequense y a todos los ciudadanos de venir a tomar un aperitivo, almorzar o cenar en el restaurante Mélisse
Aquí los atenderemos muy bien.
https://www.restaurantmelisse.com/